Sabado, 9/1/2010 - › El Fruto del Espíritu es Gozo "Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea completo". – Juan 15:11 – RV.
INTRODUCCIÓN – En los Salmos encontramos muchas motivaciones para tener alegría. David, en el Salmos 51:12, suplica: Devuélveme la alegría de tu salvación; que un espíritu obediente me sostenga". – Salmos 51:12 – NVI. La alegría de la salvación es el antídoto contra la idolatría y la hechicería. Ampliando la idea: La alegría de la salvación destruye la inclinación natural para cualquier falso sistema de culto y adoración. La alegría producida por el Espíritu Santo, unida al amor, también actúa en el sentido de comunicar el respeta para con el sexo opuesto y eliminar el deseo por el puro placer, pecaminoso y sensual. Para muchos las relaciones sexuales actúan como verdadera idolatría porque pasan a vivir en función del sexo. En griego, los términos que describen la alegría son: "charra" y "charis" – traducida al español por gracia. Las dos palabras, alegría y gracia presentan la misma raíz. Estas palabras griegas para describir gracia, trasmiten la idea de alegría graciosa y bondadosa que comunica a los otros una atmósfera espiritual. No es una emoción artificial o demostración hipócrita; también no se identifica con la hilaridad o gritería, más es el regocijo santo y sano que emana de vidas controladas por el Espíritu Santo. La salvación en Cristo Jesús es un acto siempre presente para el pecador arrepentido y perdonado. No es una promesa para el mañana, sino la seguridad para hoy, ahora. Por tanto, la experiencia cristiana necesita trasmitir la alegría de este hecho real. El mañana de las desgracias no existe en la experiencia cristiana. "Por tanto, no estén preocupados con el día de mañana. Dios cuidará del día de mañana para ustedes también". – Mateo 6:34 – Biblia Viva.
Cuando el hoy es vivido y disfrutado con la alegría de la salvación, el mañana de inquietudes nunca llegará. Piense: "Me has dado a conocer la senda de la vida; me llenarás de alegría en tu presencia, y de dicha eterna a tu derecha". – Salmos 16:11 – Nueva Versión Internacional.
Desafio: "Llegaré entonces al altar de Dios, del Dios de mi alegría y mi deleite, y allí, oh Dios, mi Dios, te alabaré al son del arpa". – Salmos 43:4 – NVI.
Domingo, 10/1/2010 - › El Mandato de Regocijarse El hijo de Dios que despertó para la grandeza de la esperanza de la salvación tiene motivos de sobra para vivir con alegría. Por eso Pablo declara con énfasis: Siempre estén alegres con sus vidas, unidos al Señor. Repito: "alégrense". – Filipenses 4:4 – BLH. Esta alegría da sentido para el vivir y con ella nos sentimos realizados: Tú me muestras el camino que lleva a la vida. Tu presencia me llena de alegría y me trae felicidad para siempre... Ustedes lo aman, aunque nunca lo hayan visto; aún que no lo vean, confían en Él; y hasta ahora mismo ustedes están felices con aquella alegría indecible que viene del mismo cielo". Salmos 16:11 – BLH. y 1 Pedro 1:8 – Biblia Viva. Esta alegría es un poder contagiante y transformador: "Devuélveme la alegría de tu salvación;... Así podré enseñar tus caminos a otros pecadores y ellos volverán a ti arrepentidos". – Salmos 51:12 y 13 – Biblia Viva. Cuando recibimos el mensaje de la salvación, El Espíritu Santo inunda nuestro ser de alegría. Es imposible retener esa alegría sin contagiar a otros. La felicidad de la salvación es un perfume que irradia de vidas convertidas. Pablo así lo declara: "Porque somos como aroma que se esparce entre los que se salvan y los que se pierden". 2 Corintios 2:15 – BLH. Con esta seguridad, Pablo declara como debe ser el cuotidiano de nuestra experiencia cristiana: "Recuérdense de lo que Cristo enseñó y que sus palabras enriquezcan la vida de ustedes y los tornen sabios; enseñen estas palabras unos a los otros y cántenlas en salmos, himnos y cánticos espirituales, cantando al Señor con corazón agradecido". – Colosenses 3:16 – Biblia Viva. La alegría de la salvación es el privilegio del fiel hijo de Dios: "Ustedes recibieron el mensaje con aquella alegría que viene del Espíritu Santo...". – 1 Tesalonicenses 1:6 – BLH.
Piense: "Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa". – Juan 15:11 - NVI. Desafio: "Finalmente, mis hermanos, alégrense en el Señor". Filipenses 3:1 – NVI.
Lunes, 11/1/2010 - › El Gozo de Cristo En Salmos 45 es exaltada la elección de Jesús, por Dios el Padre: "Tu trono, oh Dios, permanece para siempre; el cetro de tu reino es un cetro de justicia. Tú amas la justicia y odias la maldad; por eso Dios te escogió a ti y no a tus compañeros, ¡tu Dios te ungió con perfume de alegría!". – Salmos 45:6 y 7 – NVI. Y en Salmos 40, expresa la respuesta de Jesús por la elección de Dios el Padre: Por eso dije: Aquí me tienes —como el libro dice de mí—.Me agrada, Dios mío, hacer tu voluntad; tu ley la llevo dentro de mí. En medio de la gran asamblea he dado a conocer tu justicia. Tú bien sabes, SEÑOR, que no he sellado mis labios. No escondo tu justicia en mi corazón, sino que proclamo tu fidelidad y tu salvación. No oculto en la gran asamblea tu gran amor y tu verdad". – Salmos 40:7-10 – NVI. Dios ungió a Jesús con óleo de alegría y Jesús responde: "Tengo gran alegría de hacer tu voluntad, Oh mi Dios". La alegría de Jesús es la alegría del Cielo, están centralizadas en el plan de salvación. Esta alegría es tan grande en el corazón de Jesús, que aún ni la muerte hedionda de la cruz fue capaz de ofuscar el menor rayo del brillo de su alegría. Por el contrario, la alegría de salvar pecadores deshizo el dolor y el sufrimiento de la cruz. En las parábolas de la oveja perdida, de la moneda perdida y del hijo pródigo, está la alegría de salvar, se encuentra expresada en el más alto grado. El encuentro de la oveja perdida supera en mucho a la alegría de estar las noventa y nueve seguras en el aprisco. Del mismo modo, el encuentro de la pequeña moneda trasborda la alegría hacia los amigos y vecinos. La restauración del pródigo explota en brillante fiesta porque aquél que estaba perdido, fue hallado; aquél que estaba muerto revivió. Piense: "Les digo que así es también en el cielo: habrá más alegría por un solo pecador que se *arrepienta, que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentirse". – Lucas 15:7 – Nueva Versión Internacional. Desafio: "Jehová el Señor me dio lengua de sabios, para saber hablar palabras al cansado; despertará mañana tras mañana, despertará mi oído para que oiga como los sabios". – Isaías 50:4 – RV.
Martes, 12/1/2010 - › Gozo en la Obediencia Después de su comprometimiento pecaminoso con Betsabé, David hace una declaración muy importante sobre la verdadera alegría: "Devuélveme la alegría de tu salvación". – Salmos 51:12 - RV.
David tuvo la verdadera alegría, la verdadera felicidad, que es fruto de la salvación. David perdió esta alegría como consecuencia de su pecado. Suplicó a Dios: Que le devolviera la alegría de la salvación. David cuenta que reencontró la paz verdadera y la alegría permanente, mediante el reconocimiento honesto de su pecado, con la confesión genuina y en la decisión de obedecer. "Devuélveme la alegría de tu salvación y susténtame con un espíritu listo a obedecer". - Salmos 51:12 – NVI. ¿Usted ya experimentó la verdadera alegría de la salvación? ¿Qué es lo que necesitamos sentir para estar seguros de que poseemos esta alegría?
En Salmos 37, David presenta algunos ingredientes de la receta que proporciona la verdadera alegría: "Confía en el Señor y haz el bien... y aliméntate de la verdad. Agrádate del Señor, y Él te concederá los deseos de tu corazón. Entrega tu camino al Señor, confía en Él y lo demás Él hará. Descansa en el Señor y espera en Él..." Vs. 3 al 7- ARA. Las palabras centrales del salmista son: entrega, aliméntate, agrádate, descansa y confía. Estas condiciones pueden ser sintetizadas en obediencia espontánea por amor. "Si ustedes obedecieren a mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como Yo he obedecido a los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho estas palabras para que mi alegría esté en ustedes y la alegría de ustedes sea completa". Juan 15:10-11 – Nueva Versión Internacional. Piense: "Cuando tus palabras fueron encontradas, yo las comí; ellas me son mi alegría y mi júbilo, pues a ti te pertenezco, Señor Dios de los Ejércitos". – Jeremías 15:16 – Nueva Versión Internacional. Desafio: "Los preceptos del Señor son justos, y dan alegría al corazón. Los mandamientos del Señor son límpidos y traen luz a los ojos". – Salmos 19:8 – NVI.
Miercoles, 13/1/2010 - › Alegría en tiempos Difíciles La verdadera alegría se manifiesta independiente de las circunstancias. La verdadera alegría es un estado del espíritu nutrido por unas relaciones que nos hacen comprender que la vida no es apenas estos ayes que vivimos en nuestro paso transitorio por este mundo. Pablo expone este estado de espíritu en estas palabras: "Gozosos en la esperanza". – Romanos 12:12 ARA. Quién vive la bendita y gloriosa esperanza del Restablecimiento del Reino Eterno de Dios, con la restauración de nuestro planeta, aún no participando de los placeres efímeros e ilusorios de este mundo, es un hombre o mujer feliz, e irradia una atmósfera contagiante de alegría y felicidad. Todos perciben que posee algo de valor extraordinario que consigue superar todas las circunstancias adversas y difíciles. La vida del verdadero hijo de Dios, en cuyo corazón reside la esperanza de gloria – Cristo Jesús – será como el árbol plantado junto a la rivera de las aguas, siempre ofreciendo abrigo a los cansados viajeros bajo la sombra de su verdor, siempre floreciendo, siempre fructificando, siempre exhalando el suave y balsámico aroma del amor de Cristo. Él es una constante bendición y motivo de inspiración para su semejante. Tendrá siempre un cántico de alegría, loor y gratitud en los labios. Él bajo todas las circunstancias vive la alegría de la salvación. Bajo cualquier circunstancia, Dios ni siempre nos concede todo lo que deseamos, mas nos concede todo lo que realmente necesitamos. "Mi Dios pues suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús". Filipenses 4:19 – Nueva Versión Internacional. Piense: "Estas cosas yo les he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo". – Juan 16:33 - RV.
Desafio: "En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas". – 1 Pedro 1:6 – RV.
Jueves, 14/1/2010 - › Gozo Duradero "Fue por la fe que dejó Egipto, sin temer el furor del rey y resistió, como viendo al invisible". – Hebreos 11:27 – La Biblia de Jerusalén. Moisés recusó el trono de los faraones y un monumento en las planicies de Egipto, para figurar en la galería de los héroes de Dios y vivir la alegría de la salvación con la certeza de recibir el gozo duradero de la eternidad. Seguramente la búsqueda más anhelada del ser humano es sentirse bien y disfrutar la bendición de la felicidad. ¿Cómo puede alguien alcanzar la paz interior y sentirse feliz?
El profeta Isaías presenta un mensaje poderosamente importante en esta dirección: "Porque así dice el Señor Dios, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza. Y no quisisteis". – Isaías 30:15 – ARA. Cuatro palabras claves trasmiten el centro de su mensaje: conversión, sosiego, tranquilidad y confianza.
Separado de Dios, el hombre siente un vacío inexplicable en su interior, y naturalmente tiene la necesidad de llenarlo. Recurre a todo y cualquier cosa para llenar este vacío, más parece que nada resuelve. Porque el vacío es el resultado de una relación rota. La necesidad es la conversión, la entrega. A la conversión sigue otra experiencia que actúa con poder para comunicar la alegría de la salvación: el sosiego. Descansar en alguien. Jesús es el único amigo capaz de dar este sosiego. Restablecido las relaciones de amistad sigue la tranquilidad, el descanso. Descanso, tranquilidad es el regalo de Jesús para sus amigos en medio de los temporales de la vida.
Confianza es el resultado final de esta relación. Los temores desaparecen, las angustias, ansiedades, depresiones, ceden lugar a un bienestar inexplicable. La paz interior y la felicidad es un don de Jesús para aquellos que confían en Él. Piense: "Hasta ahora ustedes no pidieron nada en mi nombre. Pidan y recibirán, para que la alegría de ustedes sea completa". – Juan 16:24 – NVI.
Desafio: "Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea completa". – Juan 15:11 – NVI.
Viernes, 15/1/2010 - › Estudio Adicional. "Purifícame con hisopo, y quedaré limpio; lávame, y quedaré más blanco que la nieve". - Salmos 51:7 – RV.
Purifícame, lávame, es la búsqueda del perdón. El pecado mancha nuestra vida y destruye la semejanza con Dios; la belleza del carácter divino es mancillada por la acción del pecado y la alegría de la salvación destruida. El único agente purificador y restaurador es el perdón divino. El perdón, es una dádiva gratuita, tiene un valor inestimable, y solo puede ser valorizado en la base de la sangre, la sangre del inocente Cordero de Dios – Jesús. Es la certeza del perdón que viene por medio de Jesús que devuelve la alegría. "Oh Dios, mi Salvador, líbrame de la culpa de ese crimen. ¡Entonces cantaré loores a Tí¡. Abre, Señor, mis labios, y contaré al mundo tu justicia y tu perdón". – Salmos 51:14 y 15 – Biblia Viva.
Solamente Dios puede hacer esta cirugía, extrayendo el cáncer letal de la culpa. El problema de la culpa no está en el perdón de Dios, porque esto nos es asegurado y conferido así que reconozcamos nuestro pecado; el problema está en nosotros mismos que no conseguimos perdonarnos y aceptar que la culpa fue borrada. Cuando aceptamos el perdón y nos perdonamos, la alegría es restaurada en nosotros. Cantaré alabanzas – Perdonado y convicto de estar libertado de la culpa, el pecador siente un deseo irresistible de alabar. La alegría de la salvación inunda todo el ser que tienen sus energías renovadas.
Contaré al mundo tu justicia y tu perdón – Esta experiencia de la liberación de la carga del pecado, de la opresión de la culpa, induce a hablar a los otros con alegría convicta y contagiante. Hazme testificar esta experiencia maravillosa. Quiero contar a otros pecadores como es grande tu amor y como Él nos llena de una alegría que desborda.
La paz interior y la alegría permanente de la salvación son bendiciones de Jesús para sus amigos. Piense: "Tu me harás conocer la vereda de la vida, la alegría plena de tu presencia, eterno placer hay a tu diestra". Salmos 16:11 – NVI.
Desafio: "Alegraos siempre en el Señor, otra vez os digo alegraos". – Filipenses 4:4 – ARA.
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Conozca lo autor |  | Pr. Albino Marks Especialista em aconselhamento familiar e profundo estudioso da Bíblia, o pastor Albino Marks já atuou como preceptor (IAP, IACS, IAE-SP); capelão (IACS e Hospital do Pênfigo); diretor geral do IAP; departamental em várias associações e na UCB. |
Conozca lo traduor |  | Daniel Román Roque Después de servir en Adra Perú por algunos años, Dios me continúa dando la oportunidad de Servirle aquí en Brasil traduciendo los textos de los comentarios de las Lecciones de la Escuela Sabática, producidos por pastores para "La Escuela en el Aire" (Escola no Ar). Por lo que quedo infinitamente agradecido a nuestro Padre Celestial por aún poderle servir. |
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