Sabado, 20/2/2010 - › El Fruto del Espíritu es Mansedumbre "Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad". – Mateo 5:5
INTRODUCCIÓN – Mansedumbre – Prautes – en griego, comunica la idea de modestia, gentileza, cortesía. Estas cualidades revelan genuina ausencia de maldad y aspereza, más debidamente asociadas con paciencia y delicadeza, torna el espíritu humano apacible y sumiso a la voluntad de Dios, y como resultado natural pasa a actuar de la misma manera con relación a sus semejantes. La mansedumbre devuelve al pecador obstinado y orgulloso la verdadera humildad, reconociendo el valor de los otros y recusándose a considerarse superior. La mansedumbre es la cualidad espiritual que elimina la envidia, y los celos. Para muchos los celos se entiende como necesario para protegerse contra la falsedad y la traición. Muchos defienden este comportamiento cuando se trata de la relación conyugal. Sin embargo, la persona controlada por la mansedumbre desarrolla otra característica positiva que expulsa los celos: la confianza. Pablo en su relación de obras de la carne, declara que los celos son de origen de nuestra naturaleza pecaminosa. Jesús exaltó esta cualidad de carácter en su tercera bienaventuranza, afirmando que los tales heredarán la tierra. Podemos entender esta afirmación de Jesús en dos sentidos: Primero – Los mansos serán hombres y mujeres que esparcen bendiciones a lo largo del camino por donde pasan. En consecuencia son personas amadas por todos con quienes entran en contacto. Segundo – Traen características en su carácter que los califican para heredar la herencia de la tierra restaurada. Pablo amonesta y orienta a sus hijos en la fe para que vivan dignos de la vocación divina: "Por eso yo, que estoy preso por la causa del Señor, les ruego que vivan de una manera digna del llamamiento que han recibido, siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor". – Efesios 4:1 y 2 – NVI. Piense: "Moisés era el varón muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra". – Números 12:3 - ARA.
Desafio: "Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas". – Mateo 11:29 - RV.
Domingo, 21/2/2010 - › Manso y Humilde de Corazón El símbolo escogido por Dios para tipificar a Jesús en su vida y en su muerte fue el cordero.
Las reacciones de Jesús frente a todas las circunstancias a lo largo de su vida y también en todos los momentos que antecedieron a su muerte, siempre fueron del más perfecto equilibrio emocional, con un espíritu de mansedumbre y humildad incomparables. Ninguna reacción de ansiedad, de inseguridad, de pavor, de hostilidad, de agresividad o de cualquier otro sentimiento que pudiese macular su equilibrio emocional, se traslucía de su rostro. Cuando el profeta declara que Jesús no abrió su boca no está hablando de los muchos momentos de silencio delante de sus acusadores y verdugos, sino, se está refiriendo a sus reacciones emocionales conservadas en perfecto equilibrio cuando sometido a la más terrible y dramática muerte. No hubo lamentos, expresiones de miedo o gritos de pavor. Observemos la manera cómo Jesús actuó y reaccionó en los momentos más difíciles y crueles, del Getsemaní al Calvario. Cuando la turba que acompañaba a Judas, el traidor, se aproximó a Jesús, la dignidad con que enfrentó a sus detractores fue tan impresionante que todos retrocedieron y cayeron por tierra. Nunca encontraron un hombre tan sereno, tranquilo, manso, en momentos de agresión. Ninguna demostración de temor reflejaba el semblante de Jesús ante el cruento drama de Calvario. "Y decía Jesús: Padre, perdónales porque no saben lo que hacen". Lucas 23:34. Cuando sus verdugos estaban sin piedad traspasando sus manos y sus pies con los clavos de la condenación, Él tuvo control suficiente sobre las emociones para orar a favor de aquellos que le imponían el sufrimiento. Piense: "Angustiado él, y afligido, no abrió su boca: como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca". – Isaías 53:7 – Reina Valera. Desafio: "Así como el rostro de Caín expresaba su culpabilidad de homicida, el rostro de Cristo revelaba inocencia, serenidad, benevolencia: la imagen de Dios". – El Deseado de Todas las Gentes, pág. 754.
Lunes, 22/2/2010 - › Modelos de Mansedumbre Sin cuestionamientos, el mayor ejemplo de mansedumbre es Jesús. Notemos su postura ante sus verdugos: - "Y Jesús sin embargo guardaba silencio". – Mateo 26:63. El silencio era su más poderosa y desconcertante respuesta. Cuando hablaba siempre lo hacía con dignidad y nobleza. No obstante su silencio comunicaba dignidad y nobleza que inspiraba respeto. Cuando Pilato, sin tener conciencia de lo que estaba haciendo y diciendo, pronunció la sentencia de muerte, intensamente reclamada por los líderes espirituales actuantes, lo presentó con estas palabras incuestionables de respeto a la persona de Cristo: "¡He aquí el Hombre"… Tomadlo vosotros mismos y crucificadlo…!". Juan 19:5-6 – TEB. "He aquí el Hombre". Se encontraba en la presencia de un prepotente gobernador humano y de un populacho desvariado, y el Hombre. Qué descripción magnífica de Jesús al recibir la sentencia de la condenación. No era un hombre cualquiera, sino, el Hombre. Allí estaba el Hombre perfecto, y en perfecto equilibrio emocional, y por su espíritu de mansedumbre, dejando atónitos a sus acusadores. Es impresionante y conmovedor evaluar las reacciones de Moisés en las situaciones enfrentadas. En la apostasía del becerro de oro junto al monte Sinaí, demostró su ira contra el pecado, quebrando las tablas de la ley. En seguida se puso delante de Dios como intercesor a favor de los pecadores, dispuesto al sacrificio y a la pérdida de la herencia de la vida eterna, reclamando el perdón. Poco tiempo después, caminando por el árido desierto y oyendo las crecientes murmuraciones del pueblo y entendiendo el desagrado de Dios, "Eso pareció mal a Moisés". – Números 11:10 – NVI. Moisés, en su mansedumbre revelaba un amor apasionado por el pueblo que conducía. Piense: "La mansedumbre de Cristo manifestada en el hogar hará felices a los miembros de la familia;… Dondequiera que se la abrigue, hace de las familias de la tierra una parte de la gran familia celestial". – El Mayor Discurso de Cristo, pág. 16. Desafio: Guía a los humildes en la justicia y enseña a los mansos su camino". – Salmos 25:9 – ARA.
Martes, 23/2/2010 - › La Importancia de la Mansedumbre La mansedumbre es el poder espiritual que desarrolla un espíritu de comprensión y tolerancia para con las actitudes de rudeza y agresividad de los otros. Es el santo lenitivo que soporta a los otros en amor. ¡Cómo necesitamos de este espíritu en la vivencia cristiana, evaluando todas nuestras flaquezas espirituales!. Mantener el espíritu calmo, manso, frente a las situaciones de agresividad no es una actitud fácil de ser asumida. El consejo en Eclesiastés 10:4, es realmente desafiador. "Si un poderoso se encoleriza contra ti, no abandones tu postura, porque la mansedumbre aplaca las ofensas, inclusive graves". – Pontificio Instituto Bíblico de Roma. Sofonías tiene una preciosa promesa para aquellos que buscan desarrollar un espíritu de mansedumbre: "Buscad al Señor todos los mansos de la tierra, que pusisteis en obra su juicio; buscad justicia, buscad mansedumbre: quizás seréis guardados en el día del enojo de Jehová". – Sofonías 2:3 – RV. La mansedumbre es como un manto protector cuando las ofensas son lanzadas contra nosotros. Es también una poderosa salvaguarda para preservar la vida que recibimos por el perdón ofrecido por gracia por medio de Jesús. Cuando los exaltados en la maldad recibieren la acción de la ira del Señor, los mansos heredarán las bendiciones de la eternidad. Pablo enseña que la mansedumbre es muy importante en la manera de corregir a aquellos que no creen como nosotros en los mensajes de la Escritura Sagrada: "Así, humildemente, debe corregir a los adversarios, con la esperanza de que Dios les conceda el arrepentimiento para conocer la verdad", - 2 Timoteo 2:25 – NVI. Piense: "Tú, en cambio, hombre de Dios, huye de todo eso, y esmérate en seguir la justicia, la piedad, la fe, el amor, la constancia y la humildad". – 1 Timoteo 6:11 – NVI.
Desafio: "Con toda humildad y mansedumbre, con longanimidad, soportándoos unos a los otros en amor". – Efesios 4:2 – RV.
Miercoles, 24/2/2010 - › Practicar el Fruto de la Mansedumbre Como cualquier otro aspecto del fruto del Espíritu, la mansedumbre necesita ser cultivada, desarrollada y revelada en nuestras relaciones con nuestros semejantes. "¿Quién es sabio y avisado entre vosotros? muestre por buena conversación sus obras en mansedumbre de sabiduría". – Santiago 3:13 – RV. "Ofrézcale también la otra". Comentando la vida de Jesús, Ellen G. White da mayor luz sobre la declaración: Toda la vida terrenal de Jesús fue una manifestación de este principio… Aunque desde la cuna hasta el sepulcro lo abrumaron las calumnias y la persecución, Jesús no les hizo frente sino expresando su amor perdonador". – El Mayor Discurso de Cristo, pág. 71. Se comprende por el ejemplo de Jesús que ofrecer la otra faz es responder a la agresión u ofensa con actitud de mansedumbre y amor, amontonando así "brasas vivas sobre la cabeza", o sobre la consciencia del agresor."Si alguien fuere sorprendido en algún pecado". Dice Jesús: "Los buenos no necesitan de médico". La Iglesia es el hospital de Dios para tratar a los enfermos acometidos por el pecado. Tal como el cáncer, la manifestación de la enfermedad del pecado puede presentarse aparentemente más benigna en algunos casos y con virulencia más destructora en otros. No importa en todas sus formas el pecado siempre es mortal. Su final siempre trae consecuencias fatales para sus víctimas. El único remedio para destruir el cáncer del pecado es el amor y el perdón de Dios manifestados en Jesús. Este es el medicamento que el pecador precisa encontrar en el hospital de Dios – La Iglesia. Lamentablemente como seres humanos, tenemos tendencia a aplicar la justicia que el medicamento con amor, para restaurarlo con mansedumbre". Piense: "Nada hagáis por contienda ó por vanagloria; antes bien en humildad, estimándoos inferiores los unos á los otros". Filipenses 2:3 – RV.
Desafio: "Que á nadie infamen, que no sean pendencieros, sino modestos, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres". – Tito 3:2 – RV.
Jueves, 25/2/2010 - › La Recompensa de los Mansos Aprendemos en la lección del domingo que, Jesús venció la guerra contra Satanás y el pecado; por el espíritu de mansedumbre. Él nos induce a aprender esta lección, porque muchas y grandes son las recompensas.
"Los mansos comerán y se hartarán – Salmos 26:22 – ARC. Gran parte de versiones comunica la idea de haber sido satisfecho el hambre físico. Los argumentos que anteceden y los que suceden a esta declaración comunican ideas de loor, de alabanza congregacional y de longevidad. Esto nos lleva a la comprensión de permanencia en la presencia de Dios a través de toda la eternidad, lo que es una recompensa mucho mayor y significativa. Esta manera de comprensión armoniza con Salmos 25:9 – "Encaminará a los humildes por el juicio, Y enseñará a los mansos su carrera". – RV. - Dios guía a los humildes para que comprendan su voluntad, siguiendo el camino que los conduce a la presencia de Dios. "Mas los mansos heredarán la tierra y se deleitarán en la abundancia de paz". – Salmos 37:11 – ARC. Ligando este texto con la bienaventuranza de Jesús en Mateo 5:5; podemos entender esta afirmación en dos sentidos. Primero – Los mansos son hombres y mujeres que esparcen bendiciones a lo largo del camino por donde pasan. En consecuencia son personas amadas por todos con quienes entran en contacto. Segundo – Traen características en su carácter que los califican para la herencia de la tierra restaurada. "Jehová exalta a los humildes, Y humilla a los impíos hasta la tierra". – Salmos 147:6 - RV. – Esta es la gran recompensa de los mansos. Dios los exalta junto a su trono y a los impíos los abate.
Piense: "Entonces los humildes crecerán en alegría en Jehová, y aun los más pobres de los hombres se gozarán en el Santo de Israel". Isaías 29:19– Reina Valera. Desafio: "Tú, en cambio, hombre de Dios, huye de todo eso, y esmérate en seguir la justicia, la piedad, la fe, el amor, la constancia y la humildad". – 1 Timoteo 6:11 - NVI.
Viernes, 26/2/2010 - › Estudio Adicional ¿Cómo debe actuar el verdadero cristiano frentes a los abusos y las ofensas? ¿Qué enseñanzas trasmitió Jesús por sus preceptos y ejemplos?. Observemos las escenas más crueles en la muerte de Jesús, cuando los abusos y ofensas sobrepasaron todos los límites. El diablo llevó los castigos inflingidos a Jesús hasta el máximo de su crueldad y sus consecuencias. Satanás tentó hasta el último momento inducir a Jesús al pecado, al desequilibrio emocional, tentó de todas las formas obtener victoria sobre Cristo. "Así muchos lo contemplaron consternados (tan desfigurado estaba su rostro, y su aspecto era menos que de un hombre") – Isaías 52:14 – Pontificio Instituto Bíblico de Roma. – Los castigos físicos fueron tan crueles, que desfiguraron completamente las facciones de su rostro y de su cuerpo, mas no tuvieron poder para actuar sobre sus emociones, la burla, el escarnio, el desprecio, el cinismo, provocaciones diabólicas para desestructurar su estado psíquico. Lo emocional de Jesús permaneció absolutamente en perfecto equilibrio, hasta el momento de entregar su espíritu y morir. "Pero el Señor quiso quebrantarlo y hacerlo sufrir, y como él ofreció su vida en expiación, verá su descendencia y prolongará sus días, y llevará a cabo la voluntad del Señor". – Isaías 53:10 – NVI.
El Salvador que conozco, siempre vivió con dignidad todos los días en que peregrinó entre los hombres atrayéndolos así y a Dios. Murió con dignidad como Hombre. Los discípulos en angustiante temor enfrentando el revoltoso mar, vieron a Jesús ordenar al viento y al mar: Calla, enmudece, para luego atónitos balbucear entre sí: ¿Quién es éste, que aun el viento y la mar le obedecen?" – Marcos 4:40-41. RV. Los soldados que fueron enviados a prenderlo, declararon con convicción al Sumo Sacerdote: "Jamás hombre alguno habló como este hombre". – Juan 7:46 – RV.
Piense: "Que su belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Ésta sí que tiene mucho valor delante de Dios". – 1 Pedro 3:4 - NVI. Desafio: "Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas". – Mateo 11:29 – RV,
|
Conozca lo autor |  | Pr. Albino Marks Especialista em aconselhamento familiar e profundo estudioso da Bíblia, o pastor Albino Marks já atuou como preceptor (IAP, IACS, IAE-SP); capelão (IACS e Hospital do Pênfigo); diretor geral do IAP; departamental em várias associações e na UCB. |
Conozca lo traduor |  | Daniel Román Roque Después de servir en Adra Perú por algunos años, Dios me continúa dando la oportunidad de Servirle aquí en Brasil traduciendo los textos de los comentarios de las Lecciones de la Escuela Sabática, producidos por pastores para "La Escuela en el Aire" (Escola no Ar). Por lo que quedo infinitamente agradecido a nuestro Padre Celestial por aún poderle servir. |
|