3do Trimestre del 2008 - Un Panorama del Discipulado
Comentario da Lección 07 - Mensajeros de Esperanza
Miercoles, 13/8/2008
› El Dador de la Vida
Comentario por Pr. Albino Marks
Tradución: Daniel Román Roque
El pecado obliteró la imagen y la semejanza con Dios, rompió las relaciones de intimidad directa, cara a cara, mas no separó al hombre del manantial de la vida. El Plan de Dios para que el hombre viva feliz no sufrió alteración. No obstante el pecado, el plan de Dios para que mediante su gracia el hombre pudiera continuar lo mismo: Disfrutar vida abundante y alegrías transbordantes. Todo depende de la actitud del hombre, de aceptar o rechazar el plan divino.
A la verdad, con la caída del hombre, el río de la gracia transbordó en sus márgenes: "...mas donde abundó el pecado, la gracia superabundó". – Romanos 5:20 – BJ. Todo pecador que acepta la vida – Jesús, - es transformado en un canal de vida y alegría para vivificar a otros pecadores, "De gracia recibisteis, dad de gracia" – Mateo 10:8 BJ.
El apóstol Juan trasmite en estas palabras la experiencia de vida compartida: "El Espíritu y la Esposa dicen: ¡Ven! Y aquél que oiga diga también ¡Ven! Que el sediento venga, y quién lo desea reciba gratuitamente el agua de la vida". Apocalipsis 22:17 – BJ.
Jesús es el manantial de la vida eterna, transforma pecadores en fuentes de vida. La samaritana, olvidándose de sí misma, fue a compartir la vida: "Venid, ved a un hombre... ¿No será éste el Cristo?". Juan 4:29.
Vencido el pecado y reintegrado el hombre al universo sin pecado, la vida será el permanente don del Redentor para los redimidos: "Pues el Cordero que está en el medio del trono los apacentará, conduciéndolos hasta las fuentes de agua viva". – Apocalipsis 7:14 – BV.
En el capítulo 22:1-2, la seguridad de la vida, como el don que comunica vida eterna a los santos en el mundo renovado, es trasmitido en estas figuras: Agua que comunica vida; frutos que comunican vida, hojas que comunican vida. Así como el manantial renueva permanentemente sus aguas, el árbol de vida, de modo permanente y seguro renueva sus frutos; Símbolos perfectos de la permanente provisión de vida para los redimidos por la permanente y visible presencia de Cristo. Vida eterna manando del Manantial de vida eterna – el Trono de Dios y del Cordero.
Piense: "Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero. En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones". – Apocalipsis 22:1-2.
Desafio: "Respondió Jesús: Yo Soy el camino la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí". – Juan 14:6.
FONTE: http://www.escolanoar.org.br/
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